Existen ciertos factores como las extensas jornadas laborales, la falta de reconocimiento y problemas económicos producto de bajas remuneraciones, que influyen en el estrés laboral y en que no te sientas a gusto en el trabajo; sin embargo, existe una causa que suele ser muy frecuente y común, es tu jefe ¿es tu caso?
Según el psicólogo Robert Hogan, de la Universidad de Tulsa, siete de cada diez directores o gerentes son incompetentes, irritables, dominantes, explotadores o indignos de confianza, tienen pocas habilidades de toma de decisiones y se niegan a delegar su autoridad.
El estigma de los “malos jefes” no ha sido construido gratuitamente, más de una vez nos hemos encontrado con un jefe que nos causa desmotivación y nos pone de mal humor hasta tal punto que hemos optado por cambiar de trabajo, pero ¿cuáles son las actitudes de esta persona que nos causan esta frustración?
Entre los rasgos más comunes que caracterizan a un jefe incompetente, se encuentra la incapacidad de comunicarse, ya que no logra que su equipo lo escuche y entienda, y tampoco es capaz de escuchar a quienes lo rodean. Además, se involucra escasamente, impidiéndole conocer realmente el trabajo que realiza su gente, careciendo de información y, por lo tanto, los somete a presión.
Un buen líder posee una visión a largo plazo, es coherente en sus convicciones porque vive aquello que predica, crece y hace crecer a su gente, enseña, delega funciones y crea oportunidades para todos. Las habilidades de un líder también se observa en la capacidad de autocontrol y la toma de decisiones eficientes en momentos de crisis.
A continuación te damos 5 consejos que puedes seguir para llegar a ser un buen líder:
- Genera confianza
- Escucha atentamente a tu equipo de trabajo
- Preocúpate por su bienestar dentro y fuera de la empresa
- Comunica los objetivos del área y recuérdalos de vez en cuando
- Comparte los éxitos
- Señala tanto los aspectos positivos, como negativos de las personas
- Date el tiempo de compartir con tu equipo
Javier Caparrós, director general de Trabajando.com España señala: “Un jefe, debe ser un guía para su equipo de trabajo, una motivación diaria para lograr los mejores resultados, y ser un ejemplo de perseverancia y energía. Recuerda que un buen equipo de trabajo es el reflejo de un buen líder”.
Además añade: “En la medida que un jefe está comprometido y motivado con el trabajo, su equipo es muy probable que también lo esté, ya que esos valores se transmiten. Lo mismo en términos de conocimientos y experiencia, porque un líder que sabe puede transmitir eso a su equipo, lo que genera un que se aporte un valor añadido al trabajo diario”.